¿Qué es y cómo nace zerca!?

Es una plataforma de servicios para el comercio de proximidad. Nuestra labor es digitalizar al pequeño y mediano comercio y dotarlo de herramientas para que mejoren su rendimiento y sean más competitivos. Entre esas herramientas está la venta ‘online’, pero hay mucho más: formación, asesoramiento, bolsa de trabajo…

¿En qué fase de desarrollo se encuentra y cuando se estrenará?

Tenemos 300 establecimientos ya adheridos en Zaragoza. Lanzamos la plataforma en mayo y calculamos que llegaremos a final de año con 500 tiendas.

¿Qué valor aportará zerca! a los comercios?

Les ofrecemos digitalización en sentido amplio. Que entren a formar parte de un ecosistema de comercio de proximidad que sea capaz de asumir los retos del mercado, que son muy complicados. La herramienta más visible es el ‘marketplace’ con el que pueden vender ‘online’ en un espacio virtual con mucho más tráfico y visibilidad del que recibirían en su tienda online individual. Pero también una plataforma de formación virtual, tanto en comercio electrónico como en otras áreas de interés. Y otros servicios, como una bolsa de trabajo con profesionales formados específicamente para el comercio, hasta cómo optimizar sus facturas de electricidad o sus pólizas de seguros.

¿Qué sectores predominan entre los que se han apuntado ya al proyecto?

Tenemos de todos. Desde parafarmacias hasta moda, pasando por muebles y decoración, puericultura, mascotas… en resumen son las mismas tiendas que puedes encontrar físicamente en tu barrio, que ahora también se hacen accesibles para el consumidor.

¿Será un proyecto local?

Desde el minuto uno nace con vocación nacional. Lo vamos a poner en marcha en Zaragoza pero ya estamos trabajando con otras administraciones territoriales en proyectos tanto dentro como fuera de Aragón. Este mismo año se pondrán en marcha alguno. En zerca! tenemos la tecnología más puntera que existe en el sector, los socios más competitivos, como HENNEO, Ibercaja o Correos, y dos años y medio de trabajo acumulados para ser un referente nacional en digitalización del comercio de proximidad.

La pandemia que ha impulsado la venta ‘online’ de productos frescos, y ahí cuentan con Mizesta. ¿En qué consiste?

Es el mercado ‘online’ de zerca! Arrancamos antes, en 2018, y tiene tres patas: la venta del Mercado Central, del de Valdespartera y, desde esta semana, ofrecemos Mizesta Ayuda, una iniciativa con carácter social fruto de un acuerdo con Correos. Es un servicio que se ofrece a los mayores de 65 años, que pueden hacer la compra por teléfono, en lugar de usar internet, por si no disponen de los medios o de la capacidad.

¿Cómo funciona?

Nos dan su lista de la compra, el operador toma nota y en un plazo de 48 horas le llevamos ese pedido a su casa sin gastos de envío.

¿Ha crecido la demanda ‘online’ durante el estado de alarma?

Ha aumentado mucho el número de pedidos. Para este periodo de crisis hemos cambiado un poco la operativa de Mizesta para poder dar mas servicio a los consumidores. Habitualmente combinamos productos de mercado fresco con otros de supermercado. Ahora, para tener mayor capacidad de servicio, solo damos el fresco. Estamos teniendo una demanda brutal.

¿Qué radiografía hace del comercio de proximidad de la capital aragonesa?

Se parece bastante en todo el territorio nacional, lleva décadas levantando la persiana todos los días para dar un servicio cercano, y en la última lo ha pasado mal porque ha sufrido la crisis económica de 2008 y la competencia de los grandes operadores y gigantes del comercio electrónico. Hay negocios que han detectado la necesidad de digitalización antes que otros y se han puesto a ello. La ventaja del pequeño comercio es que puede ofrecer una experiencia de compra mucho más personalizada y jugar con la omnicanalidad, que te permite ver el producto en tienda y comprarlo ‘online’, verlo ‘online’ y comprarlo en tienda, etc. Además, pueden dar un artículo mucho menos masificado, más personalizado.

¿Cómo va a evolucionar a partir de esta crisis?

El horizonte que se presenta a partir de ahora para la economía en general y el ‘retail’ en particular es muy complicado. El pequeño comercio ya vivía una situación delicada. Ahora va a cambiar nuestra forma de consumir y la digitalización no va a ser un requisito para ser competitivo, va a ser un requisito para sobrevivir. La única salida que tiene el comercio es su digitalización. 

 

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